El primer Grito de Independencia de Esteban Villegas Villarreal, estará de la mano con una nueva forma de hacer política, y el ADN del nuevo mandatario estatal está directamente relacionado con por lo menos tres factores, que a nuestro juicio serán el parteaguas de su administración, el desarrollo regional, la asistencia social y la imagen urbana; elementos que ha dejado de manifiesto no solo en campaña, sino también a su paso por la presidencia municipal de la capital, en el periodo comprendido del 2013 al 2016, donde principalmente a través de la gestión con otras instancias gubernamentales, se pudieron concretar acciones en beneficio de los duranguenses, aunado al oficio que ha mostrado en los últimos días para tocar las “puertas” del Gobierno Federal, pues la prioridad en este momento, incluso antes de asumir, es la preparación del Paquete Fiscal, la Ley de Ingresos y el Presupuesto de Egresos 2023.
Tendrá a cuestas una situación financiera complicada, pero parte de su ADN también radica en la habilidad para lograr aliados que le permitan encaminar su gobierno hacia los objetivos que se ha trazado, de ahí que la reunión que sostuvo hace unos días con los presidentes electos del estado, habla de la apertura que tendrá al interior de la entidad, lo que le ayudará a su vez en su propia gestión de recursos ante la Federación, pues él al no ser excluyente por motivos político-partidistas, será su “carta de presentación” en Palacio Nacional para pedir el mismo trato, y que las diferencias ideológicas no sean un impedimento para que desde el Gobierno Federal se considere a Durango.
El desarrollo regional del que se expresó en campaña, parte también de su propio origen y esencia, por lo que explorar los mecanismos y las oportunidades que tienen todos y cada uno de los municipios será una herramienta que les permita avanzar a todos hacia un mismo rumbo. Hablamos de que cada región pueda explotar sus potencialidades y no tratar de hacer un “todo” en el estado; en lo económico y turístico cada zona tiene la posibilidad de desarrollarse, lo que implica un mayor flujo de recursos que lleguen directamente a los bolsillos de cada habitante de los municipios, desde luego bajo esquemas de coordinación y organización que les permita “jalar” hacia el mismo lado.
El elemento relacionado a la asistencia social, tanto Esteban como su esposa Marisol, mantienen una cualidad que se convierte en habilidad para desarrollar esquemas de apoyo a los sectores más vulnerables, e incluso la nueva realidad implica atender las causas de forma directa, sin intermediarios, por lo que será otro sello en la próxima administración. De igual forma lo relacionado con la imagen urbana, que a lo largo de la historia reciente la capital ha tenido un nuevo rostro, dejando en claro que la modificación de nuestro centro histórico ha estado proyectado para que cada administración haga lo propio, y en el caso del gobernador electo, a su paso por la presidencia municipal, conoció e impulsó gran parte de lo que mostramos como un atractivo del municipio.
En el ámbito político, Villegas Villarreal también ha dado muestras de tener un ADN con apertura, su paso por el Congreso del Estado, incluso como presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política, le permite mantener un diálogo constante con partidos contrarios al que él milita, y bajo este escenario es viable que mantenga esta postura durante su sexenio, respetando acuerdos pero también generando las condiciones para que los asuntos puedan transitar, de entrada en el legislativo y buscando siempre la gobernabilidad.
Pajareando.
Nada está escrito en el gabinete de Antonio Ochoa, él mismo ha descalificado las listas que comenzaron a circular, desde luego existen las presiones por las posiciones y ésta es una de ellas, pero el presidente electo ha sido muy claro, no hay nada para nadie, hasta el día en que asuma las riendas del municipio, lo que se diga antes, será simple especulación.
