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Para controlar el poder y la discrecionalidad debe existir la garantía política

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“Un buen gobierno no se hace maniatando a las instituciones, se logra con la garantía política de los derechos fundamentales”: Diego Valadés, presidente del Instituto Iberoamericano de Derecho Constitucional.

Durante tres días de la semana pasada la facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad Juárez (FADERyCIPOL) fue sede del 1° congreso Internacional sobre Constitución, Derechos Humanos y Justicia Constitucional.

Del 19 al 21 de octubre, se tuvo la presencia de los más importantes investigadores y académicos de cinco países: Cuba, España, Francia, Perú y por supuesto de México, con temas relevantes y de actualidad.

Llamó la atención sin duda la temática relativa al populismo y a la reforma electoral que está por revisarse por la cámara de diputados en México. 

De manera destacada con la generosidad y humildad que lo caracteriza el Dr. Diego Valadés, presidente del Instituto Iberoamericano de Derecho Constitucional abordó las características de un buen gobierno, donde se deben de construir controles políticos funcionales para la defensa eficaz de los derechos.

En nuestro país, existen diferentes formas del ejercicio discrecional del poder y no existen formas de que respondan por sus actos ante la sociedad, por lo tanto, hay carencias en el ámbito político porque no se tiene una forma eficaz para la defensa de los derechos de igualdad, libertad y dignidad.

Si bien es cierto que se avanzó en nuestro país en la defensa jurisdiccional de los derechos fundamentales, es necesario pensar que lo que se perfila en este siglo XXI es la construcción de la garantía política de los derechos, a través de un proceso parlamentario, destacó el doctor Valadés.

Para el abogado Diego Valadés, es de suma relevancia tener controles políticos más eficientes y funcionales para que se consigan la defensa eficaz por la vía política de nuestros derechos.

Además, es necesaria la construcción del diseño de un Buen Gobierno, donde ninguna institución prevalezca sobre otra, sino que cada una pueda ser controlada de acuerdo con lo que estable la ley.

En el análisis presentado por el presidente del Instituto Iberoamericano de Derecho Constitucional los gobernados deben tener libertades y vivir en igualdad plena, mientras que los gobernantes cumplan de manera eficiente las responsabilidades y tareas que cada sistema constitucional les asignó y para los cuales fueron nombrados.

El derecho al Buen Gobierno no se hace maniatando a las instituciones se hace dando a cada una de ellas lo que le corresponde y controlándola para que cumplan con sus responsabilidades y no incurra en omisiones, excesos o acciones discrecionales.

Las reflexiones expuestas por el Dr. Diego Valdés, sin duda constituyen el camino para el análisis y la discusión sobre todo en lo relativo a la existencia ya no solo de una garantía jurisdiccional en la defensa de los derechos fundamentales, sino también en la edificación y concreción de la garantía política.

Fue así que durante tres días los invitados a participar en 8 mesas de discusión, dos conversatorios y conferencias magistrales, reflexionaron sobre los temas de actualidad y de manera específica en la defensa de los derechos humanos desde diversas vertientes.

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