Si no se aparece un tercero en discordia, un candidato fuerte que divida el voto, sin duda, la lucha por llegar a Palacio Nacional, será entre la “señora X” y Claudia Sheinbaum. Ironías de la vida y la historia política de México: Xóchitl y Claudia representarán a una sociedad polarizada en busca de la presidencia de México. Usted podrá pensar, que dicha polarización se debe a motivos ideológicos entre la derecha y la izquierda, entre la extrema derecha o extrema izquierda, al menos, muchos no comparten esa opinión.
Si alguna vez, el PRI o el PAN, tuvieron alguna ideología, eso ya forma parte del pasado. Si el priismo en el pasado, presumía “del nacionalismo revolucionario” y las palomitas blancas vestidas de azul, “la filosofía humanista”, en la actualidad, se llama pragmatismo. Por el PRI, Carlos Salinas y Ernesto Zedillo, fueron la causa del principio del fin del otrora partido de Estado. Por si le quedara alguna duda, vea usted la reciente fotografía en la sede nacional del PRI, la cúpula de ese partido, rindiéndole pleitesía a la “señora X”. Lo bueno y el mensaje de dicha fotografía, es que no había personas entre ellos como las ha definido la señora Gálvez: “ni huevones, ni rateros o pendejos” sino todo lo contrario.
Y por el PAN ni se diga, Vicente Fox y Diego Fernández de Ceballos, se encargaron de darle la estocada a los principios y valores de Manuel Gómez Morín. ¡Que cosas tiene la vida Mariana! Hoy el PRI, PAN y PRD, “olvidándose de las diferencias ideológicas que los separan”, los une el amor por México. ¿Y cuál es este amor que dicen sentir por México? ¡Regresar a como de lugar a la presidencia de la República! Ya sabe usted, que a las ambiciones por el poder no conocen fronteras, y el Frente Amplio Opositor sabe muy bien, que el fin justifica a los medios.
Y que mejor para intentar regresar a Palacio Nacional a través de Xóchitl Gálvez, una política que no tiene experiencia para hacer presidenta de México, fácil de seducirla política y mediáticamente. Como diría el clásico; la hidalguense les cayó como anillo al dedo, porque salvo Beatriz Paredes Rangel, no tenían nada para enfrentar a MORENA. Por increíble que parezca, muchas y muchos priistas locales andan de fiesta, aseguran que Xóchitl es un refrito de Vicente Fox y que ella, “sacará a patadas a MORENA de Palacio Nacional. ¿Ya se les olvidó que Fox los sacó a ellos ayudado por Zedillo, a patadas de Los Pinos? Parafraseando al divo de Juárez; no cabe duda, que la ambición es más fuerte que el poder. Hoy el PRI y el PAN, siguen de luna de miel.
Solo una figura política de último momento, una personalidad que pudiera cambiar el rumbo de la elección que se avecina, evitaría que Claudia y Xóchitl fueran la única opción para el país. No es bueno ni sano para México, políticamente hablando, que tengamos que escoger entre melón y sandía. En fin, en ocho meses que faltan para el día de la elección, se espera que las y los mexicanos emitan un voto razonado y no, emocional o folklórico.