En los casi cuarenta años de existencia de la escuela de la tercera edad, nunca se había presentado un libro. Ciertamente las actividades de esta emblemática institución están encaminadas a la convivencia de adultos mayores donde además de tomar cursos reciben alimentos en un ambiente sano, limpio y de armonía.Igualmente, con frecuencia se proporcionan conferencias o pláticas sobre tanatología, nutrición y todo lo relacionado con el gusto por la vida. A mediados del mes de enero, desde la ciudad de Chicago los hijos y esposa de Ernesto Márquez se comunicaron con la Licenciada María Auxiliadora Romero, Directora de la escuela. El motivo de la llamada fue solicitarle su autorización para que el libro “Entre cuerdas y pensamientos” se presentara en la escuela de la tercera edad. Para ello le enviaron una reseña biográfica de su señor padre, el inolvidable músico duranguense al que generaciones enteras conocían con el apodo de Caruso. Después de una rápida y efectiva organización, el pasado tres de febrero se presentó la biografía de Ernesto Márquez, que apenas para diciembre del 2022 había fallecido, lo que quiere decir que, a menos de un mes y medio de su partida, se estaba presentado el libro de la autoría del escritor Alfredo Antonio Solano Arellano. Desde Indianápolis y Chicago se hicieron presentes los cuatro hijos y la viuda del recordado músico, que tenían la encomienda de su señor padre de presentar el libro en la escuelita de la tercera edad, donde el dio clases de guitarra e hizo muchos amigos. Una grata velada que contó con más de un centenar de asistentes que se deleitaron con un video sobre Carusso, escucharon su voz y la magia de las cuerdas de su guitarra, sus hijas cantaron sus canciones, sus amigos, compañeros, algunos familiares y todos los presentes conocimos y reconocimos la semblanza de un personaje de esos que dejan huella y trascienden en el tiempo. Y no es para menos. Ernesto Márquez nació el 5 de febrero de 1936 en la ciudad de Durango. Cuando era niño, Ernesto recibió el apodo de “Caruso” de sus compañeros por ser un cantante destacado en la escuela. Al principio, no le gustó, ya que le hizo sentir que se estaban burlando de él. Sin embargo, después de que su padre le explicó quién era Enrico Caruso y qué cantante talentoso era, aceptó el apodo y se le quedó grabado por el resto de su vida. Don Ernesto fue profesor de música y artista y nunca dejó de actuar o enseñar. En México, fue maestro de ceremonias, cantante principal y guitarrista de la Orquesta de Nuco Cisneros de Durango durante 6 años. También estuvo en la Orquesta de El Chato Romero, formando más tarde sus propios grupos que actuaban regularmente. Dio clases en más de 60 instituciones, entre ellas: Universidad Juárez, El Quinteto Nocturno, La Rondalla Universitaria, CERESO (clases para presos), CECAPI (escuela para ciegos), DIF (centro cultural de Durango), grupos militares (que actuaron frente a dos presidentes mexicanos), escuelas privadas, grupos juveniles con problemas, INJUVE (clases para jóvenes desfavorecidos), bancos y muchos otros. También dio clases particulares a generaciones de las familias más distinguidas e influyentes de Durango. Llegó a actuar en dos ocasiones para el famoso Trío Los Panchos. “Entre cuerdas y pensamientos” fue un evento lleno de emotividad, pues compartir la celebración de vida de Caruso fue sin duda un acontecimiento en la vida cultural y musical de la ciudad. Al final de la tertulia la familia les pidió a los asistentes que compraran en libro, pues lo recaudado iba a ser destinado a la escuela de la tercera edad.Felicidades a la señora Auxi, como cariñosamente le dicen sus colaboradores, pues desde su llegada al frente de la escuela el cambio ha sido más que notorio
