A pesar de que falta alrededor de un mes para que se esté desarrollando de lleno el proceso electoral para la renovación de la rectoría de la Universidad Juárez del Estado de Durango (UJED), los movimientos y ajustes de los aspirantes comienzan a hacerse más visibles. Así ocurrió este fin de semana con un encuentro entre dos de quienes desean llegar a esta posición, Nadia Patricia Mejía Rosales, ex directora de la Escuela de Lenguas, y José Ramón Duarte Carranza, ex director de la FECA; ambos destacaron que parte de dicho encuentro es con el propósito de encontrar las coincidencias, pero no descartaron trabajar en unidad.
Esto sin duda es uno de los mensajes de unidad que deberán prevalecer al interior de la máxima casa de estudios, pues ambos perfiles académicos tienen importantes “cartas credenciales” para ser considerados en la posición que hoy ostenta el rector, Rubén Solís Ríos, y me parece que estas señales que envían en cuanto a la autonomía son relevantes, máxime porque si bien faltarían más académicos que han “levantado la mano”, creo que se debe privilegiar la armonía, pues a los propios universitarios no les conviene llegar a una elección mediante el encono entre aspirantes.
Si bien aún falta camino por recorrer en esta elección, pues ni siquiera se han establecido las bases de la convocatoria, creo que los “amarres” se darán más adelante. Mejía Rosales y Duarte Carranza saben de la importancia del respeto a la UJED, de que los ánimos no se desborden para que una vez pasando el proceso todos, como factor de crecimiento de la universidad, vuelvan a la posición que los propios universitarios decidan, quienes ganen a hacer su mejor trabajo desde la rectoría y quienes pierdan, regresen a la cátedra con esas misma convicción de seguir aportándole a la máxima casa de estudios.
Dos más.
Es probable que más adelante también podamos ver en esta serie de encuentros a dos perfiles más que se han mostrado con el interés de participar, el actual director de la Fader y Cipol, Rafael Mier Cisneros y al catedrático e investigador, Manuel Murillo, quienes también hablado de la importancia de la autonomía universitaria y han dado muestra de que también les importa el diálogo y la armonía en este proceso. Desde luego será interesante ver si se crea una gran alianza entre los perfiles que hemos mencionado, pues todos han hablado de ese respeto que debe haber al proceso que los universitarios llevarán a cabo.
García.
Quien también ya ha dado muestras del movimiento intenso que trae al interior de la UJED es otro de los aspirantes, Ramón García, quien a inicios de la semana pasada recibió el respaldo de quien fuera candidato a la rectoría hace seis años, y quienes muchos pensamos que repetiría en la elección de este año, Jorge Cisneros, ex director de la Facultad de Medicina, quien externó que se suma al proyecto que encabeza Ramón García, pues considera que representa lo que la máxima casa de estudios necesita.
La semana pasada también se supo de un encuentro entre dicho aspirante y el recientemente ganador en la elección de la dirección de la FECA, Jesús Sotelo; de haberse concretado me parece que también es una señal de lo que Ramón García busca hacer con los nuevos directores que serán factor en el proceso de renovación de la rectoría, pues los titulares de cada unidad académica sí influyen de cierta manera en cada elección de rector.
Ganadores.
Más allá de lo que ocurra en la elección, me parece que los grandes ganadores deberán ser todos los universitarios, pues aun hay muchos pendientes en la máxima casa de estudios, sobre todo en rubros como el financiero y que no sea año con año un problema para el pago de las prestaciones de fin de año de los trabajadores; así como el hecho de darle continuidad a la gestión de recursos que se requerirán para continuar la construcción y equipamiento del nuevo campus en Vicente Guerrero. La tarea es mucha.