Nada molesta más a la sociedad que saber implicados a los servidores públicos en actos de corrupción, pues en lugar de ejercer el encargo para el que fueron contratados, hayan “tomado” dinero que no les corresponde para obtener un beneficio propio, y a pesar de que esta información debe tener su proceso legal, para demostrarse con pruebas y que no tengan forma de librar la justicia los señalados, creo que siempre será importante actuar en contra de quienes se les compruebe que propiciaron un desvío.
Y es que en las últimas horas se han dado a conocer las órdenes de aprehensión, así como el aseguramiento de casas, locales, terrenos y vehículos de lujo, propiedad de ex funcionarios de la pasada administración estatal, quienes de acuerdo a investigaciones realizadas por la Fiscalía General estuvieron sustrayendo cantidades importantes de dinero en efectivo durante los últimos cuatro años, esto derivado también de una detención en flagrancia de una persona, ex colaboradora de la secretaría de finanzas, con dinero en efectivo, lo que provocó este tipo de investigaciones que han ido dando los resultados que los duranguenses hemos estado conociendo, y que por obvias razones se mantiene una percepción negativa del actuar de la anterior administración.
Si bien todo mundo es inocente, hasta que se demuestre lo contrario, creo que la primer oportunidad que tienen todos los nuevos gobiernos que asumen alguna responsabilidad brindada por los ciudadanos, se centra en el tiempo que corresponde a la entrega-recepción, pues de acuerdo a la normativa estatal se disponen de 60 días luego de haber asumido la responsabilidad el nuevo titular, por lo que a pesar de ser demasiada la información que se genera en un sexenio, es el tiempo suficiente para detectar las anomalías en el manejo financiero, de ahí que hoy existan estos señalamientos en estas últimas horas, del desvío de aproximadamente mil 500 millones de pesos, es decir, no es como ir al cajero, sacar y guardarlos en la cartera, pues aquí debió haber varias partes involucradas, incluso dentro de las entidades bancarias, algo que deberá comprobarse de ser el caso.
Simple y sencillamente se está cumpliendo con una tarea primaria, que tiene sus mayores implicaciones contra ex funcionarios cuando sí existen anomalías respecto al manejo de los recursos, y si se hacen dentro del plazo de la entrega-recepción con mayor razón, pues es el síntoma inequívoco de la realidad con las que la nueva administración está iniciando, lo que directamente le abona a su credibilidad, siempre y cuando los ciudadanos podamos tener la certeza de que se hará justicia, ya sea con el retorno del recurso que se les imputa sustrajeron, o bajo medidas más severas como la privación de la libertad; y serán los abogados de ambas partes quienes lo determinen, pero la señal es clara, “no se solapará a nadie”, dijo el gobernador Villegas Villarreal.
La importancia de proceder también implica evitar ser omisos ante este tipo de irregularidades, tal como ha sido señalada la ex contralora del estado, así como la Entidad de Auditoría Superior del Estado (EASE), donde incluso se ha afirmado que “no se revisaron a detalle los movimientos” hechos por la pasada administración. Si bien esto no podría convertirse en un “revanchismo”, creo que la omisión debe tener también sus consecuencias en todos los niveles. Estamos pues ante un escenario complejo, presupuestalmente hablando, para este gobierno que apenas cumplió un mes al frente del estado, y de los procesos de revisión, legales, dependerá en gran medida la consolidación del arranque del mismo.
Pajareando.
Buena respuesta por parte de los duranguenses en los eventos con motivo del Festival Revueltas, eso habla de un buen trabajo y coordinación entre las áreas correspondientes, pues a pesar de que durante los últimos años no fue posible realizarlo, esta edición trajo calidad en los espectáculos que se presentaron, que incluyeron también artistas de nuestro estado, bien por eso.
