Parafraseando a Porfirio Díaz: el PAN tan cerca del PRI y tan lejos de la alianza. En la mesa al parecer, no existe ningún problema entre quien se autonombra líder político del PRI y del PAN, a la hora de formalizarse una posible alianza. De manera particular, nos referimos al municipio de la capital en el ya próximo 2025. El actual presidente municipal Toño Ochoa Rodríguez, desde hace tiempo alzó la mano para decir que buscará reelegirse.
En el PRI, “los mariachis callaron” ante las intenciones del panista Toño Ochoa. Todo parecía color de rosa y sin embargo, no se tardaron mucho en el Bicentenario para dar línea a través de sus voceros: Humberto Zurita y Daniela Soto. Los focos rojos se encendieron y ahora resulta, que el jefe político del tricolor estatal pensó: “no contaban con mi astucia”. Y puso en la mesa, a Ali Gamboa y al secretario de educación Guillermo Adame. Al buen entendedor pocas palabras. El mensaje político fue dirigido a los panistas y en especial a Toño Ochoa, más claro ni el agua: la alianza la encabeza el PRI o no hay.
¡Qué cosas tiene la vida Mariana! Toño Ochoa no debería preocuparse si el PRI lo acompaña en sus intenciones para buscar ser presidente por otros tres años. Su circulo rojo desde ahora, deben estar pensando cual será en su momento el partido a vencer. Podría suceder que los priistas locales, se quedarán “chiflando en la loma” por aquello: “ya es tiempo de que el PRI regrese al municipio”. Como están las cosas, si el PRI está pensando en regresar al municipio de la capital, si es pasión que se les borre.
Con problemas, virtudes y defectos, Toño les lleva ventaja por el solo hecho de ser el presidente municipal. Por cierto, hablando de mujeres y de traiciones, desde que se reformó la ley en el caso de Durango, nadie ha podio reelegirse. El primero que lo intento fue José Ramón Enríquez y no lo logró. Toño Ochoa se convierte en el segundo presidente municipal que lo va a intentar, pero dependerá de las circunstancias. El PRI y el PAN, para poder ser competitivos con MORENA, necesariamente necesitan ir juntos y si ninguno cede, entonces, asumirán el costo político.
De acuerdo con lo que se comenta, quien manda en el PRI ya enseñó sus cartas para regresar al municipio: Ali Gamboa y Guillermo Adame. En política las encuestas que hacen los partidos políticos son como la Carabina de Ambrosio. Decimos esto porque quienes resultan candidatas o candidatos, son los que van abajo en las encuestas. Del “gato” Adame y Ali Gamboa, se dice que la priista encabeza las encuestas, pero esto no le garantiza, que ella sea la candidata. En el caso de Toño Ochoa no tiene problemas: con alianza y sin alianza, será el candidato del PAN. O como dijo José Alfredo Jiménez: “¡con dinero o sin dinero, pero sigo siendo el rey!” ¿Será?