El dengue, una enfermedad que en el pasado parecía ajena a Durango, ha encontrado en nuestro estado un terreno favorable, como consecuencia del cambio climático y la acumulación de agua estancada. Frente a esta amenaza, surge un compromiso colectivo: el Gobierno municipal de Toño Ochoa, con el apoyo del Gobierno estatal de Esteban Villegas, que en conjunto, con la ciudadanía realizan un trabajo en equipo para proteger la salud de la población duranguense, tanto en comunidades rurales como en la capital.
En coordinación con la Secretaría de Salud del Estado y diversas áreas clave, se han diseñado e implementado estrategias integrales para prevenir la proliferación del mosquito transmisor del dengue. La meta es clara: proteger a la población con acciones efectivas que abarquen desde la prevención hasta la eliminación de criaderos.
Entre los principales esfuerzos destacan los realizados por las áreas de Salud Pública, Servicios Públicos, Desarrollo Rural y el área de Vectores de la Secretaría de Salud Pública. A través del programa Limpiemos la Casa y la campaña de descacharrización, una flotilla de camionetas recorre comunidades recolectando desechos que los camiones convencionales no pueden levantar, eliminando posibles focos de reproducción del mosquito.
El área de Desarrollo Rural, por su parte, desempeña una labor crucial en la concientización de las comunidades rurales. Estas acciones preventivas incluyen: eliminación de cuerpos de agua como charcos y lagunillas, promoción del uso de mosquiteros en puertas y ventanas, vigilancia y mantenimiento de bebederos para ganado y animales domésticos, colocación de tapas en tanques de almacenamiento de agua, entre algunas otras actividades.
Estas medidas no solo buscan mitigar la propagación del dengue, sino también fortalecer la cultura de la prevención en el entorno cotidiano. El mensaje es claro: la lucha contra el dengue requiere el esfuerzo de todos. Desde el gobierno hasta cada hogar, es fundamental asumir la responsabilidad de mantener nuestros espacios libres de criaderos. La prevención es la clave, y el compromiso con la salud de las y los duranguenses no admite treguas.
Trabajemos juntos para cuidar nuestro entorno y proteger lo más valioso: nuestra salud.