Las elecciones se efectuaron con normalidad, ciertamente no hubo violencia en la que se tuvieran que lamentar la pérdida de vidas humanas, por supuesto hubo situaciones preocupantes, particularmente en Aguascalientes y Tamaulipas, pero el que haya habido secuestrados en Durango, no es cosa mínima.
En Tamaulipas era normal que el gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, intentara a toda costa detener el triunfo de Morena, sabe que hay elementos para que ingrese al selecto club de ex gobernadores en prisión. En este estado pierde el PAN, pierde el registro el PRD y el PRI batalla para no perderlo.
Aguascalientes, como se tenía previsto, gana el PAN, la candidata de Morena logra más de 30 puntos, un hecho inusitado, porque en anteriores elecciones, apenas había llegado al 12%. La elección se ha impugnado. Serán las instancias electorales las que determinen si hay procedencia o no.
Donde se esperaba más competencia era en Quintana Roo, no fue así, la candidata morenista aventaja de manera irreversible y al PRI se le complica conservar registro.
Un hecho digno del anecdotario electoral. En el estado de Hidalgo, después de 93 de tener el poder, pierde el PRI. Derrota dolorosa.
En Oaxaca nada podía hacer la oposición, no solo la diferencia de votos es grande, lo que sorprende, es que después de que el PRI es gobierno, tiene problemas para su registro estatal.
En Durango, según los datos del Programa de Resultados Preliminares (PREP), Esteban Villegas de la alianza “Va por Durango”, tiene ventaja irreversible de cuando menos 15%. Triunfo histórico considerando qué hasta los mismos del PRI, a nivel nacional, llegaron a presagiar derrota del tricolor, las encuestas daban diferencias mínimas de uno a tres puntos, empate técnico.
Pero la elección fue de sorpresas: El triunfo de Esteba Villegas rompió todos los pronósticos e hipótesis imaginadas. No solo eso, el porcentaje de votación fue muy alto, se venció al abstencionismo, uno de los más altos en la historia electoral de Durango, y el más alto de los seis estados en donde hubo elecciones.
Dirán que para una votación así, la afluencia de votantes es grande, filas largas, movilidad intensa. Ciertamente hubo traslado de ciudadanos a las casillas, (lo platican los taxistas), pero una entusiasta y masiva participación ciudadana, nadie la vimos.
Se difunden actas y resultados a pie de casillas en donde no cuadran los totales, pudieran ser casos de excepción de quienes no supieron llenarlas, pero esto genera rumores: qué si están saliendo diferencias de cerca de diez mil votos solo en Durango, que se detecta la misma situación en municipios como: Guadalupe Victoria, Santiago Papasquiaro, Gómez Palacio, Lerdo. Se asegura que en estos últimos municipios volverán contar y se habla que vendrán cosas muy fuertes.
Por lo pronto, el PRI es el gran ganador, primera fuerza política. Morena con más de 20 municipios ganados y 180 mil votos, no le fue mal. El PAN se derrumbó, pasa a tercera fuera política.
El Instituto Electoral y Participación Ciudadana, tiene la obligación de darle legalidad a esta etapa, que los resultados sean: transparentes, creíbles y confiables. O no.
