Si la 4T quiere avanzar en Durango, debe construir acuerdos y no destruir proyectos. Al parecer eso lo han entendido por fin los morenistas, que son los que regular y periódicamente “se agarran del chongo”, pues todo indica que para el Cabildo capitalino, los regidores electos de MORENA: Cynthia Hernández, Jorge Silverio e Ignacio Fuentes, junto con los petistas: Claudia Domínguez y Primitivo Ríos, conformarán un bloque opositor, cuya finalidad será asumir con responsabilidad, el rol que les tocará jugar en Durango a partir del 1ro de septiembre, donde el Ambiente Político les exige que volteen a ver las demandas de la gente, enfocándose en sus soluciones, dejando a un lado sus pleitos internos, para que puedan asumir causas propias, y de paso, también dejen de “colgarse” de todo lo que dice “ya sabes quien”, que en muchos casos, no hay ni cómo defenderlo.
Para lograr es importante acuerdo cuatroteísta, fue necesario que se reunieran los personajes antes mencionados, sin embargo, independientemente de quién haya tomado la iniciativa en esa convocatoria, que quedó plasmada en las redes sociales, las señales que envían los integrantes de la fracción de MORENA, es muy oportuna. Cynthia, Jorge y Nacho, han entendido que no pueden estar fragmentados, ya que ellos, junto con Primitivo y Claudia, con los legisladores locales: Sandra Amaya, Marisol Carrillo, Alejandra del Valle, Ofelia Rentería, Cristian Esparza, Eduardo García y Bernabé Aguilar; con los senadores Margarita Valdez, José Ramón Enríquez y Gonzalo Yáñez, así como algunos funcionarios federales, que sí se han puesto las pilas como Iván Ramírez y Nacho Aguado, formarán parte del principal referente de la Cuarta Transformación en Durango, cuya nota característica, ha sido la división, más allá del tema legislativo. Por eso, repartirle culpas al “PRIAN”, no les fue redituable electoralmente hablando, y por sí fuera poco, vienen arrastrando el lastre del “cochinero” atribuido a Otniel García Navarro por acción, y por omisión, a Marina Vitela.
Suena lógico pensar que, para llegar a un acuerdo con los petistas, el cual derivó en el anuncio de la conformación del bloque opositor MORENA-PT en el Cabildo, los morenistas debieron dar un paso fundamental, es decir, acordaron entre ellos. En efecto, Cynthia, Jorge y Nacho, deben hacer un equipo indisoluble, que sea capaz de ser contrapeso con el bloque aliancista conformado por los regidores del PAN y del PRI, que dicho sea de paso, han dado muestras de que van a trabajar muy de la mano con Toño Ochoa, para darle continuidad a lo que se ha hecho bien en la presente administración a cargo de Jorge Salum, pero también para contribuir en la solución de los pendientes que dejará, pues en tres años, indudablemente, es imposible resolver todo lo que se ha venido arrastrando con el paso de las administraciones.
El acuerdo MORENA-PT en el Cabildo protagonizado por Cynthia, Jorge y Nacho, es también una oportunidad para recuperar la confianza del sector afín al cuatroteísmo, lo que ciertamente no es fácil, dado que MORENA, en estos momentos no tiene diligencia, según lo señaló Sandra Amaya, pues así se lo informaron los altos mandos nacionales. Al margen de los orígenes de grupo de los regidores morenistas electos, se deben mantener unidos en medio de la tempestad interna, porque no hay nada -de momento-, que les garantice que después de ello, les llegará la calma.
