Miles de trabajadores y maestros, este viernes salieron en larga marcha del edificio central de la UJED, hasta EL Bicentenario, cede del gobierno del estado. Con diferentes consignas que iba desde: “Fuera el Rector”, exigencia del pago de cuatrocientos millones de pesos que adeuda el gobierno del estado, hasta, “de nuestro salario ni un peso menos”.
La marcha recordó las grandes manifestaciones sindicales de hace décadas por su combatividad, hoy, con una gran participación, en donde maestros y trabajadores administrativos se trasladaron desde la Ciudad de Gómez Palacio.
“Ni un paso atrás”, es la consigna que definió la decisión de los académicos en contra de la intención de rectoría de mermar su salario, sin que dé respuesta satisfactoria a los planteamientos de los gremios, lo peor, los funcionarios de la institución no saben, ni entienden, ni conocen la universidad.
Una prueba de ello, es el video que comunicación social de la UJED sube a Redes, en donde la contralora afirma que no encontraron aviadores en la universidad, y solo a una veintena que en ese momento no se encontraban en sus centros de trabajo, a quienes se les notificó que informen donde estaban.
Esto significa que la funcionaria hizo una vista panorámica por escuelas, y diferentes unidades de investigación, cultura, arte y deporte para ver quien estaba laborando, lo cual es una forma absurda de detectar aviadores.
La funcionaria, está muy lejos de saber qué para un trabajo de esa naturaleza, necesita usar como instrumentos de investigación las nóminas, las cargas horarias, la productividad, los centros de adscripción, las antigüedades, incluso, los nombramientos.
La Contralora nos da la impresión de que cree que detectar aviadores es ir a los centros de trabajo, quien este presente no lo es, quien no lo esté, está bajo sospecha.
Asombra el simplismo de la Contralora, asombra la ingenuidad y falta de profesionalismo del área de comunicación social, que la hace pública; lo que significa que tampoco saben en donde pisan
Con esos niveles de conocimiento de la institución por parte de los funcionarios, es imposible que entiendan la naturaleza de la crisis en la que están inmersos, por lo tanto, incapacitados para dar salida a la crisis cuyas dimensiones escapan a su comprensión.
La falta de proyecto, visión, compromiso, de la actual administración, hizo que se rodeara de funcionarios por recomendación o por compromisos personales o de grupo, sin tener el mínimo perfil para desempeñar su trabajo.
Nos da la impresión, aunque suene a frivolidad, que el rector puso el nombre de cada una de las dependencias en un papelito, lo dobló, lo metió en un frasco y le habló a sus amigos para que “la mano santa” les sacara su papelito. El reparto de la administración por el asombroso método de la tómbola.
Por eso, hay indignación de fondo, por eso, los trabajadores y maestros no están dispuestos a llevar sobre sus espaldas el fracaso administrativo, académico, cultural, deportivo y el caos financiero en la universidad, ni el descrédito social. Por eso, gritan a voz en cuello “ni un paso tras”. O no.
