Parafraseando al compositor Cuco Sánchez: los partidos que son un gran puerto, donde unos llegan y otros se van. La historia de la clase política nacional y local, está llena de esos ejemplos. Aquí en Durango Aispuro, Otniel García Navarro, Iván Gurrola, Oscar García Barrón, Gustavo Lugo, Marisol Carrillo y Patricia Flores Elizondo son algunos ejemplos. Hace algunas semanas, Omar Castañeda tomó la decisión de irse de MORENA, para llegar a Movimiento Ciudadano. El actual diputado federal, tiene sus orígenes en la lucha social de la izquierda, mucho tiempo fue militante del PRD, pero políticamente quien le ha dado más, es MORENA o mejor dicho, lo que significa Andrés Manuel López Obrador.
¿Por qué se fue Omar Castañeda a MC? Muy sencillo: en MORENA ya no tenía futuro político. La relación política con Marina Vitela nunca fue buena. La gota que derramó el vaso, fue cuando Omar quiso ser el candidato a la presidencia municipal de Gómez Palacio. A la distancia, no hubiera ganado, pero pudo haber sido un candidato más competitivo frente a Leticia Herrera. Omar fue muy lejos con Marina Vitela, hizo denuncias en su contra de desvío de recursos públicos, que era dueña de fraccionamientos y de residencias de lujo, entre otras cosas. Al día de hoy, la sociedad no ha tenido noticas de las famosas denuncias o si hay una carpeta de investigación en curso o cosa por el estilo. Pasan las campañas políticas, se termina la guerra sucia y el tiempo pone a cada quien en su lugar.
La llegada de Omar Castañeda a ese partido, se negoció con el gerente de movimiento ciudadano Dante Delgado. Omar le pudo decir a Dante, ¿qué me vas a dar sí me voy que merezca sacrificio? Como usted sabe, en 2024 habrá elecciones presidenciales, senadores y diputados federales. Omar Castañeda no llega a MC para formarse en la fila. Dante Delgado sabe que Omar no ganará, pero le dará votos a su partido. Con el arribo del ex-morenista a Movimiento Ciudadano a varias y a varios les movió el tapete, comenzando por Martín Vivanco, Martha Palencia, Patricia Flores Elizondo por mencionar algunos.
Muy pronto nos daremos cuenta de los acuerdos entre Dante Delgado y Omar Castañeda. Pero también, si la militancia acepta al recién llegado, y se convierta en diputado federal o senador de la República. Ni modo, si la decisión se tomó en las cúpulas de Movimiento Ciudadano, ya ni llorar es bueno. O como dice el refrán, nadie sabe para quién trabaja. Ya es tiempo que dejemos de sorprendernos todo lo que sucede en los partidos, los militantes se van a otro porque así conviene a sus intereses, los partidos ven a los de enfrente que les pueden significar votos, lo que los beneficia con más recursos para ellos.
