El pasado 20 de julio, el gobernador Esteban Villegas, en compañía del presidente de la República Andrés Manuel López Obrador, encabezó el evento que se realizó con motivo del centenario luctuoso del general Francisco Villa. Esteban, precisó al “primer mandatario”; que tanto el como su madre, al igual que el “Centauro del Norte” eran oriundos del municipio de “San Juan del Río”. Villegas calificó como un sueño la presencia del presidente en la exhacienda La Coyotada, además agregó: después de más de 40 años, puede estar de nuevo un Presidente de la República que entiende de la historia, que entiende de la lucha, que entiende de las personas más necesitadas”.
Villegas, no desaprovechó la oportunidad de agradecerle a López Obrador, el apoyo brindado durante sus primeros 10 meses de gobierno, destacando el saneamiento de las finanzas del estado. No es tema menor haber pasado en un lapso de tiempo muy corto de semáforo rojo a semáforo verde, la estrategia del gobierno estatal dio resultado, pero fue fundamental los apoyos extraordinarios del gobierno federal. Sin embargo queda muy claro que apenas es el principio, no será ni rápido ni fácil, salir de la enorme deuda y grave desfalco que dejó el gobernador panista Rosas Aispuro.
Aunque fue muy breve el tiempo que permaneció AMLO en nuestra entidad, en todo momento se vio una gran empatía entre los mandatarios, una relación cordial y afable. En su discurso de bienvenida el gobernador lanzó varias arengas: “¡Qué viva el valor revolucionario! ¡Qué viva Francisco Villa! ¡Qué viva la gente de Durango! ¡Qué viva el Presidente de la República! ¡Qué viva Durango! ¡Qué viva México!”. Esteban fue pródigo al agradecer al presidente, su presencia y su apoyo a Durango, pero en ningún momento existió exageración o lisonja.
Villegas Villareal, está consciente del la importancia que tiene para Durango, mantener una buena relación con el presidente de la República. Bastaría recordar que en su toma de posesión el 15 de septiembre, Esteban afirmó; que sería un aliado de AMLO, hasta que este finalice su sexenio, además envió un mensaje al presidente, prometiendo estar de su lado para sumarse “a la lucha por los que menos tienen”. Cuando ha existido una mala relación entre el ejecutivo federal y el estatal, en Durango se viven tiempos aciagos, bastaría recordar la animadversión mutua entre el gobernador Ángel Sergio Guerrero Mier y Vicente Fox, y ni que decir de los escollos que provocó Aispuro, con sus falaces afirmaciones, que AMLO no quería a Durango, y que no llegaban los recursos.
La buena relación de Esteban con AMLO, pone en evidencia su talento y talante político, pues ha logrado que al presidente no le incomode, que el gobernador haya surgido de una coalición opositora a su proyecto. Villegas tiene que navegar por las aguas embravecidas por las acusaciones, que con razón o sin ella, lanzan diariamente las huestes del “Frente Amplio por Mexico” contra el presidente. Y es que no se puede minimizar el hecho, que “Va por Durango” es la única alianza del PRI, PAN y PRD que funcionó, por lo que el proyecto con el que ganó Esteban, se convierte en el prototipo de la alianza opositora para el 2024.
Sin embargo, Esteban sigue haciendo que el presidente se enamore de Durango.
