Dicen los que saben que, con respecto de los candidatos, las campañas políticas tienen se componen de dos a tres etapas, mismas que tienen que ver con darlo a conocer, posicionarlo y finalmente ofrecerlo como la mejor opción para el electorado. Cuando los aspirantes no son muy conocidos y no tiene arraigo en el territorio que pretenden conquistar, su campaña cobra o toma impulso cuando ya va muy avanzada, lo que quiere decir que muchas veces el posicionamiento nunca llega. Paty Jiménez no necesita agarrar vuelo para que los durangueses que vivimos en la ciudad la conozcamos, pues desde su incursión en la vida pública, se ha convertido en un personaje de la política que, en base a su productivo trabajo, ha conseguido aportar y sobre todo hacer conexión con la sociedad. Su cercanía con todos los sectores de la población, su eficiente labor como legisladora ya sea en el cabildo como en el congreso del estado, así como su conocida vocación feminista, le permiten ser la candidata a Diputada Federal por el cuarto distrito. La respuesta de quien no conoce a Paty Jiménez simple y sencillamente es que nadie puede decir que no la conoce, pues la empresaria, emprendedora e incansable mujer no lleva una vida rutinaria, siempre está con muchas actividades y como diputada local pasa mucho tiempo en la calle. Parece que, para los partidos políticos, no es rentable destinar recursos para promover el voto a favor de candidatos que no sean presidenciales. Los espacios de radio y T.V., y la mayoría de las actividades de propaganda partidista se centran en posicionar a estos últimos. Sin embargo, tenemos actores más cercanos a nuestra realidad local e inmediata, como los candidatos a diputados federales y locales, además de senadores por quienes vamos a votar y de quienes en su mayoría no sabemos nada. Una de las enormes diferencias de Paty con respecto de su adversario de nombre Primitivo Ríos, es que Paty representa a los que todos los días se levantan a trabajar, a aquellos que se esfuerzan por llevar alimento a sus casas y a sus familias esforzándose, produciendo, de los que conquistan las cosas con lucha y organización sin que nadie les regale nada. Pero al mismo tiempo es una mujer sensible que se da cuenta del atraso, miseria y pobreza de miles de familias que requieren ser escuchadas, lo cual no les desconocido, pues en cuanto terminan las sesiones en el Congreso del Estado, su principal actividad es recorrer las calles, colonias, ejidos y fraccionamientos para conocer y resolver en la media de lo posible, las necesidades y carencias de miles de duranguenses.La hoja o trayectoria de vida de un candidato, define en pocas palabras qué habilidades y conocimiento tiene para contribuir al fortalecimiento de la sociedad que pretende representar, por lo que, partiendo de esa premisa, indudablemente que Paty está más que sobrada. Más allá de la historia, los principios y el peso relativo de los partidos políticos en distintos momentos del devenir político del paísy particularmente de Durango, nos ha demostrado que la participación de las mujeres no ha sido preponderante. Sin embargo, en todos los casos hay mujeres con trayectorias notabilísimas que han logrado estar en los niveles más altos de representación y toma de decisiones, pero ¿qué determina o facilita el éxito de estas mujeres? Muy sencillo, pregúntenle a Paty, no será difícil encontrarla, pues en Durango quien no conoce a Paty Jiménez, futura diputada federal por Durango.
