Sin lugar a dudas algo está pasando en la Secretaría de Bienestar a nivel federal en Durango, pues desde hace ya varios días, decenas de personas que aseguran ser beneficiarias del programa “Sembrando Vida”, han denunciado que desde hace aproximadamente un año, no reciben ese beneficio y nadie en esa dependencia les da razón del dinero que legalmente les corresponde, para colmo de males, nadie en esa institución ha dado la cara en torno al tema para saber que fue lo que pasó con ese asunto, en donde podría haber varias personas involucradas.
Se debe recordar que este programa, como otros tantos, ya es constitucional y por ese motivo, el recurso que llega a los beneficiarios, debería estar etiquetado y al mismo tiempo, debería ser intocable por parte de funcionarios federales, mismos que están impedidos de retener el recurso, hacer mal uso de él o redireccionarlo a otro rubro distinto para el cual fue autorizado, de ahí que el actual superdelegado Jhonatan Jardines deba dar la cara y dar alguna explicación, lo cual está claro, no ha hecho y ello se presta a muchas interpretaciones, pues sea cual sea la razón de que el dinero no llegó, debería darse una declaración al respecto y no guardar silencio.
Se habla de más de 130 personas que en Durango, no han recibido ese beneficio en más de un año, cuando deberían de llegarles poco más de 6 mil pesos mensuales a cada uno de ellos, lo que está claro no ha ocurrido, al único que se le ve con disposición de orientar a los quejosos, es a Iván Ramírez Maldonado, al que claro está, le urge que el caso se aclare, pues si los tiempos que denuncian los campesinos son ciertos, entonces la irregularidad de la cual se hace referencia, se dio cuando él era el coordinador estatal de los programas federales, de ahí su premura de que se aclare todo el tema, pues trae planes electorales.
Veremos si finalmente autoridades de Bienestar, de cualquier nivel, dan la cara en torno a este penoso asunto o al menos, anuncian alguna investigación al respecto que lleve a los responsables de esta omisión, misma que podría marcar la carrera como funcionario público de varios personajes, pues al parecer, estas no son las únicas anomalías que se están cometiendo en esa dependencia federal, pues nos aseguran que graves violaciones a las condiciones laborales de sus trabajadores se han estado cometiendo, desde octubre de este año, como obligarlos a trabajar de lunes a domingo de 8 de la mañana a 11 de la noche, pero ese tema bien vale la pena exponerlo en una próxima entrega. Al tiempo.