Desde hace mucho tiempo la sociedad se pregunta: ¿qué hay detrás de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Durango? Y sin duda, la llamada FEUD es un botín muy codiciado de la clase política local, cuando ejerce el poder. Solo así se explica, que en la ya próxima elección para elegir a los integrantes de la FEUD, los que aspiran tengan recursos de sobra para sus campañas, dinero que llega de aquellos que quieren tener el control de las y los estudiantes de la UJED.
Y hablando de mujeres y de traiciones, el dinero que circula para patrocinar las campañas con la intención de dirigir la FEUD, no es de dudosa procedencia, sino todo lo contrario. Como diría el clásico; lo que se ve no se pregunta. Pero este recurso que se les da a los jóvenes tiene un precio: en su momento, tener el control, cobrar facturas y así, utilizarlos cuando se necesite. Pero en realidad, eso no debe sorprender a nadie, todos están en la “polla” desde las autorid,ades universitarias y los grupos de interés que existen fuera de la UJED.
Dice el refrán: el que paga manda, o como dice la canción: “nadie vende un caballo por bueno ni te hacen rico quedándose pobres”. Históricamente la FEUD, les ha servido a muchas y muchos universitarios que han escogido la noble profesión de la política, para terminar “sacrificándose por Durango”. Unos con la intención de llevarnos a la grandeza y otros para que renazca Durango. Algunos todavía andan como el famoso comercial del whisky: siguen tan campantes. Entonces otra vez, no podemos evitar parafrasear a Gustavo Díaz Ordaz: la FEUD es el trampolín y la alberca el poder.
Pero también, quien llega a ser líder de la FEUD, pone su granito de arena. En primer lugar, ejerce un férreo control a través de las presidentas o presidentes de las escuelas y facultades de la UJED. Entre otros privilegios maneja un presupuesto de varios millones de pesos al año. Cabe aclarar, que dichos recursos son públicos, es decir, salen de nuestros impuestos. Tiene derecho a picaporte con los rectores en turno y ya encarrerado el gato, con autoridades de primer nivel.
Hasta el día de hoy, la sociedad no sabe si los recursos que maneja la FEUD, son auditados por alguna autoridad o si esta se les práctica los 28 de diciembre de cada año. Por supuesto, solo estamos hablando de lo que se ve por encimita en la elección de la FEUD, porque siguiendo
con el tema financiero que maneja, pudiera haber más, porque son recursos que se manejan a discreción por el rector en turno es decir, según el sapo es la pedrada.