En la lucha por el poder, unas veces funciona la guerra sucia y en otras ocasiones, se revierte. Recordamos, las primeras dos veces cuando intentó ser presidente de México Andrés Manuel López Obrador, la guerra sucia le funcionó al PRI y al PAN, pero en la tercera ocasión, la guerra en su contra de nada les sirvió. Decían de AMLO, que era un peligro para México, que nuestro país sería otra Cuba y una Venezuela, que se terminaría la propiedad privada o que el dólar llegaría a 100 pesos, en esa tercera ocasión las y los mexicanos ya no cayeron en las trampas de la guerra sucia.
Hay partidos políticos que siguen pensando que con la guerra sucia llegan al poder, como sería en este momento el caso de Durango. La guerra sucia tiene un fin: desprestigiar al adversario político de tal modo, que no llegue o regrese al poder. En este contexto, da la impresión de que los estrategas del PRI y del PAN, se jugaron el todo por el todo, como sucedió en el canal 12, al pretender judicializar un asunto que era totalmente político. Y mucho tememos, que la guerra sucia en estas campañas llegó a su fin, salvo, algo inesperado de último momento que cambie el rumbo de la elección.
Por supuesto, la guerra sucia en contra de alguien no es gratis, esos favores se cobran muy caros porque nadie “vende un caballo por bueno, ni se quedan pobres haciéndote rico”. Dice un dicho; golpe que no tumba fortalece. Sin duda si la idea era descarrilar la candidatura de MORENA, Verde y PT, a la presidencia municipal y aunado al debate le pudo dar simpatías y votos al doctor José Ramón Enríquez. Siguiendo con el tema de la guerra sucia que no se ocupa, no solo se señalan errores de los adversarios y en ocasiones, llegan hasta su vida privada y esa es, otra historia.
Si la guerra sucia en política es un arma de dos filos, ¿por qué se insiste en ella? La respuesta es muy sencilla, el recurso más fácil, se cobra muy bien y no garantiza los resultados. No está por demás, recordar una vez más la guerra sucia en contra de Andrés Manuel López Obrador, ¿Cuántos miles de millones le pagaron al español que hizo el trabajo sucio? Y fueron dos campañas presidenciales en contra de AMLO, pero al final, lo hicieron mártir y llegó a la presidencia, y ya encarrerado el gato, dejó a Claudia Sheinbaum Pardo, y para que saquen a MORENA de Palacio Nacional, está como el nombre del rancho donde actualmente vive el expresidente.
Pero también, hay otro tipo de guerras sucias, esas que no se venpero todo mundo sabe cómo y quiénes las realizan con tal de seguir en el poder. ¿Para usted, no es una guerra sucia amenazar a las y los trabajadores de la burocracia estatal, que si no votan por el PRIAN habrá consecuencias? En contra de este tipo de guerras, también hay respuestas: el voto es libre y secreto, la sociedad de Durango es libre de votar por quien decida. De la sociedad depende quien pierda o quien salga victorioso, pero que no se vote con miedo o con amenazas porque esa también, se llama guerra sucia.